Después de días, la verdad
muchos, varios meses para ser exactos, me vuelvo a dejar ver por estos lares.
Allá por febrero habría este espacio con ilusión y con una noticia sobre el
dopaje en el ciclismo que nos tocaba muy de cerca. Tras todo este tiempo (
pasados ya la Eurocopa y los JJ.OO) esperaba que a lo mejor pasara algo interesante,
de revuelo mediático vamos, y ha salido. Además me sirve para cerrar círculos.
El dopaje.
En los deportes de alta
competición siempre se habla del “ fair play”, del deporte sano , sin trampa ni
cartón. En Londres se cargaron a unos
cuantos antes de empezar y a otros después, pero el deporte que se lleva la
palma y está cargado de sospechas infundadas por el pasado fundamentadas en el
dopping, es el ciclismo. Está al orden del día. Es como el wassupp ,si no lo tienes estás fuera de onda wei, pues si ahora no
te atiborras de sustancias no puedes jugar con los mejores en esto del
ciclismo. Parece ser así. Todos conocemos la ristra de corredores que cayeron
en estas redes, han sido unos cuantos, y los que quedan seguramente. Pero el
destino o las circunstancias llevan a tener ahora, cual traca final de un
concierto, al que fue y lo es de momento el mejor ciclista de todos los tiempos
para mi, a tenor de los números. Se llama Lance. Se apellida Amstrong, y según
algunos es víctima de una caza de brujas manejada y controlada por las
organizaciones más poderosas y por algunos de sus compañeros de filas. Vaya
marrón para el americano, tanto como si es verdad como si no. Si es verdad, es
una marranada por parte de sus compañeros ya retirados, y si es mentira ya
hablaríamos en otros términos, susceptibles de no ser publicados. Ya se sabrá.
Recordemos efectivamente
que este “ idilio” ( sí, soy amante del humor negro) viene de lejos. Después de
que ganara las primeras etapas en la Lieja-
Bastone- Lieja, superó un cáncer testicular a lo campeón y decidió subirse
a la bici solamente para ganar. Finalizada su última quimioterapia el 2 de octubre
de 1996, el 25 de julio ganó su primer Tour, al que seguirían seis más. En
verano del 2005 en Francia se publicaba que se había encontrado EPO en muestras
de su orina, en un control realizado en el Tour del 99. En 2006 gana su primera
batalla, en un juicio contra los autores del libro “ L.A. Confidentiel”, en
donde se hablaba de dopaje. En 2010 Floyd Landis, ya sancionado por dopaje y
antiguo compañero, destapó el tarro de las esencias acusándolo de haber
practicado el dopaje en 2002 y 2003. A partir de aquí empieza un calvario para
él, en forma del año 2012. Aquí entra en juego la USADA ( Agencia Antidopaje de
EE.UU), y éstos siguen con la investigación. Amstrong presenta una demanda para
detener el procedimiento, pero no da sus frutos, silencian de por vida a tres
socios suyos ( dos doctores y su
entrenador), y seguidamente ni ellos mismos se ponen de acuerdo sobre quien
debe dirigir las acusaciones. Debería ser resuelto por el TAS. Llama la
atención la poca organización que hay. Finalmente todo esto se sabe porque
Lance recientemente ha decidido no seguir defendiéndose, aconsejado por sus
abogados, y quizás también utilizarlo como última baza para desencajar a la
USADA y evitar el juicio público que ellos quieren. El esquema es claro: como
va a ser sancionado si o si, mejor morir por lo que uno cree y con las botas
puestas.
“Llega un momento en la
vida de cualquier hombre en el que tiene que decir: ya es suficiente. El coste
que ha tenido para mi familia y mi fundación ( su fundación contra el cáncer),
me ha llevado a terminar en este sentido”. Ha dicho Amstrong. En la otra parte
también lo tienen claro “ Se trata de un ejemplo claro de como la cultura de
ganar a cualquier precio puede, si no se controla, sustituir a la competición
justa, segura y honesta”. Por otro lado la UCI es cautelosa y compañeros suyos de profesión como Hincapie,
Leipheimer, Vndevelde, Vaugthers y a la cabeza Tyler Hamilton, no se lo pondrán
fácil, “ Yo vi EPO en su nevera, vi más de una vez como se la inyectaba. Lo
hacíamos todos” Vaya machada!.
Si todo esto se concreta, y
pierde todo lo que ha ganado desde 1998, incluidos los siete Tours, la sombra
del dopaje no se despejaría de los campos Elíseos ni mucho menos. Tiene miga la
cosa. Álex Zülle sería el ganador del Tour de 1999, Jan Ullrich se haría con
tres tours de una tacada ( 2000, 2001 y 2003), Andreas Kloden en el 2004, Ivan
Basso en el 2005 y el español Joseba Beloki en 2002 ( a éste también se le
colgaría el San Benito del eterno segundo, dos veces) Pero todos estos nombres fueron
sospechosos de dopaje también, a Ulrich se le implicó en la Operación Puerto y fue sancionado con
dos años, e Iván Basso confesó su relación con Eufemiano Fuentes. De los otros
no hay sospechas de momento. Por eso resulta curioso que se le den los Tours a
estos corredores y se desposea de ellos a Amstrong.
Finalmente después de todo
lo que se sabe cada uno tendrá su opinión, y la mía es clara: esperemos a lo
que puede pasar, Lance, lo tienes crudo, si es verdad, también has sido el
mejor en llevar la difícil empresa que es burlar los controles de dopaje hasta
ahora. Yo tengo dudas. Las dudas hay que resolverlas antes de nada. Te vas a
quedar sin Tours, ya te han jodío,
pero si al final puedes limpiar tu imagen mucho mejor. Inocente hasta que se demuestre
lo contrario. Para los dos lados. No enterremos a nadie antes de que se muera.

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